Las secuelas de la migración y el desplazamiento

 


·         Migrar es un acto de cruda valentía, los móviles pueden ser disímiles entre sí, pero siempre albergan la imperiosa necesidad de mejorar las condiciones, el escape de situaciones económicas, políticas, sociales o ambientales.

·         En el proceso de movilidad hay un alto coste emocional, físico y económico, dado que hay una constante y urgente necesidad de adaptación al entorno y eso, anudado con los fenómenos de xenofobia, violencia simbólica y falta de empatía agudiza las percepciones que tiene de sí mismos y de la población que les rodea. En la emergencia del sujeto que migra la cultura del silencio de su entorno le lapida, la necesidad de abrigo y de arraigo escaso y se recrudece la sensación de nostalgia y de ausencia.

·         El flujo migratorio influye en la proliferación de emociones, tanto las loables como lo son la empatía y la solidaridad de las personas locales, impactando su identidad como miembros de una comunidad más amplia, y en el reforzamiento, también, de cosmogonías xenófobas y actitudes de apatía o aprovechamiento económico del sujeto-migrante vulnerable

·         Cuando abordamos la migración de tránsito es esencial reconocer que la meta de los migrantes es seguir su viaje, generalmente hacia el norte del continente, esto debe permitirse con criterios de seguridad, garantizando la protección tanto de los migrantes como de las comunidades locales. El objetivo es minimizar el riesgo de exposición a actores armados y grupos criminales, como El Clan del Golfo, que podrían afectar los derechos de los migrantes, al tiempo que se fomenta una relación simbiótica entre las comunidades locales y los migrantes.

·         La subjetividad del migrante parte de un estado de vulnerabilidad y exposición compleja, dado que la ronda la sensación de desamparo, de desplazamiento, duelo y partida, aunque también le rondan emociones diversas como la esperanza por el reencuentro, los potenciales mejores materiales, la alegría y la siempre lapidante incertidumbre.

 

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